Los factores de éxito de cualquier individuo están enmarcados dentro del contexto de la educación que haya recibido. Esta oportunidad inicia en casa desde el acompañamiento y la formación en familia y se complementan con el papel que juega la educación formal, tanto en los colegios como en la educación universitaria.
Actualmente, estos factores están, indudablemente, sujetos a las oportunidades de aprendizaje que se hayan tenido. Bajo este aspecto, la educación bilingüe en nuestro país juega un papel importantísimo en el rol y en las circunstancias a futuro que tengan los niños y jóvenes que acuden al sistema escolar.
Según Anne Marie Truscott de Mejía, Investigadora y maestra de la Universidad de los Andes, (citada por Manrique, 2006) “es innegable que ante los retos del mundo globalizado, la educación bilingüe es una necesidad antes que una particularidad de formación”. No se trata de pensar en que se aprende una lengua extranjera o segunda lengua con el propósito de conocer su simple estructura y usarla como medio de comunicación por necesidades especiales, por el contrario, lo que se busca es que “una persona que se educa de manera bilingüe, recibe promoción de la competencia verbal usando ambas lenguas como medios de instrucción para porciones significativas del currículo académico. El bilingüismo no es ofrecer clases de una segunda lengua, sino a enseñar a los estudiantes a utilizar las lenguas (primera y segunda) como medios para aprender y trasmitir el conocimiento.
La oportunidad que brinda una educación bilingüe, radica en los momentos de exposición a otros propósitos sociales y culturales que vienen implícitos en la misma intención de comunicación que se va adquiriendo a través de los años. Se aprende no sólo a hablar y a escribir, sino a actuar en esa nueva cultura y a cómo desenvolverse en ella.
Esta situación, sin duda, aporta a quien tiene la oportunidad de crecer en un ambiente bilingüe a que sus condiciones de vida sean distintas y mucho más favorables a nivel de conocimiento. La tecnología, el comercio, el fenómeno de la globalización, las oportunidades de acceder al conocimiento por las redes se constituyen en condiciones necesarias para poder vivir en un mundo mucho más exigente y mucho más competitivo.
En el Colegio La Arboleda contribuimos a que este propósito sea alcanzado, a que nuestros estudiantes hagan parte de las necesidades que requiere la ciudad, la región y el país de ser más competitivos y que puedan ser parte de ese gran capital humano que requiere este mundo globalizado.
Articulo escrito por: Alejandro Cárdenas, Coordinador Académico Bachillerato del Colegio La Arboleda.
