Llega nuestra primera izada de bandera del 2022 y con ella queremos exaltar uno de los valores que caracteriza nuestra educación centrada en el ser: la honestidad.
Para Germán Nieto, rector de La Arboleda, desde que el colegio se consolidó hace más de 26 años, la honestidad ha sido una de las bases de la educación y del actuar de nuestros profesores y estudiantes. “La enseñanza y la práctica de este valor nos ha permitido comprender el mundo que nos rodea, actuando de manera positiva, coherente y proactiva y como consecuencia, tomando decisiones acertadas que buscan el respeto al otro a través de su reconocimiento como semejante y diferente”.
Enseñar el valor de la honestidad en espacios escolares y familiares facilita el desarrollo de otros valores como la lealtad, la confianza, la responsabilidad, la mistad y la justicia. En este blog de La Arboleda te compartimos datos clave para enseñar y promover la honestidad en los niños.
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La honestidad se aprende con el ejemplo: Observar a los adultos decir mentiras u ocultar cosas será el camino para que los niños aprendan que la honestidad es algo que no les favorece y que todo es permitido mientras no se descubra la mentira. Por eso, el ejemplo entra por casa. Toma la iniciativa para decir y buscar la verdad todo el tiempo para que tu hijo copie esta conducta.
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Explica qué significa la honestidad: Hablar con tu hijo sobre qué es la verdad y cómo esta le ayuda a ser mejor persona son el primer paso. Busca referentes cercanos de quienes diciendo la verdad lograron cambios significativos en sus acciones. Explícale que las personas que mienten no son confiables. Una actividad para ayudar a explicar este valor es la lectura de cuentos relacionados con el tema. “Un encigüeñado día de boda”, un relato donde las pequeñas mentiras y ocultamientos son tan malos como los grandes.
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Enseña y escucha: Descubrir a tu pequeño diciendo una mentira es una gran oportunidad para enseñarle. Pregúntale por qué sentía que necesitaba mentir y lo que podría haber hecho de manera diferente. Un cuento que puedes leer con él es “Las honradas mariquitas”, donde la honradez es tan valorada por todos y su falta nos hace romper la confianza, un valor que no debe ponerse jamás en riesgo.
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Premia la verdad: Tu pequeño desarrollará confianza en sí mismo y reforzará su comportamiento positivo si cada vez que dice la verdad lo elogias con abrazos y palabras positivas. Una actividad para reforzar esta conducta son los títeres que permiten fortalecer el aprendizaje de forma más significativa. Ayúdale a crear los personajes y a que arme el relato del hecho en el que fue honesto. Al finalizar el juego, pregúntale qué aprendió de los personajes..
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Ambiente de honestidad: Motivarlo a que se rodee de amigos honestos refuerza este valor en su vida cotidiana y le permitirá que en un futuro todos vivan de acuerdo con este principio.
Una actividad para reconocer si están en un ambiente de constante honestidad, es el juego de las “Tarjetas de sí y no”. Trata de ubicar imágenes donde tu pequeño sea capaz de mirar situaciones cotidianas como, por ejemplo, que a un compañero de clase se le caiga un juguete de la maleta y el niño lo entregue. Al mismo tiempo enseña una tarjeta donde salga la misma situación pero con otro desenlace, es decir, que el niño se guarde el juguete. Luego pregúntale cuál es la tarjeta que evidencia honestidad y refuérzale porqué razón es importante utilizar ese valor toda la vida. Esta actividad le ayudará a sacar adecuadas conclusiones.
Finalmente, recuerda que la honestidad es un valor que necesitamos para tener una vida plena en sociedad y que el ejercerla de forma constante, nos permite una vida en coherencia entre nuestras ideas y las acciones.
Si te gustó este contenido sobre el valor de honestidad, te invitamos a leer nuestro blog “Cuatro palabras para una vida consciente”. Léelo AQUÍ.
Somos un Colegio donde aprendemos a vivir, pensar y compartir respetando las diferencias.
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