En estos momentos difíciles se dan sentimientos de ansiedad tanto en los niños como en los adultos. Sabemos que la forma en que un niño reacciona y los signos de angustia que muestran pueden variar, dependiendo de la edad del niño, de sus experiencias previas y cómo el niño generalmente enfrenta el estrés. Los niños también se ven afectados por la forma en que los adultos a su alrededor responden a situaciones estresantes.
Nuestras propias reacciones a la situación actual, las conversaciones que tenemos al alcance de nuestros hijos y las formas en que discutimos con ellos también influirán en cómo ellos se sientan y las afronten.
Cómo hablar con los niños sobre COVID-19:
Ante todo, con tranquilidad y no evite hablar del tema porque los niños lo están escuchando de muchas fuentes. No hablar sobre algo puede aumentar la preocupación de los niños. Considere la conversación como una oportunidad para comunicar los hechos y definir el tono emocional. “ustedes deben ocuparse de informarse y de filtrar las noticias que les llegan a sus hijos”: Recuerde a los niños que los investigadores y los médicos están aprendiendo todo lo que pueden, tan rápido como pueden, sobre el virus y están tomando medidas para mantener a todos a salvo.
Bríndeles información adecuada para su nivel de desarrollo:
No dé demasiada información, ya que esto puede ser abrumador para los niños. En su lugar, intente responder sus preguntas. La respuesta debe ser lo más honesta y clara posible. No es necesario que tenga todas las respuestas; lo importante es estar disponible para escuchar a su hijo y que sea él el que le cuente qué sabe sobre el Coronavirus y cómo se siente al respecto.
Si usted se siente muy ansioso y asustado al respecto tómese un momento para calmarse antes de tener una conversación con su hijo o responder sus preguntas.
Es muy importante tener en cuenta que ya que los niños son muy egocéntricos y literales con la información y las noticias sobre el Coronavirus puede ser suficiente para que realmente piensen que van a contagiarse con la enfermedad. Por ejemplo, para reconfortarlos, podrían explicarles que el Coronavirus es en realidad es muy poco común (a diferencia de la gripe), y que de hecho los niños desarrollan síntomas muy leves.
Los niños se pueden sentir más tranquilos cuando saben qué hacer para protegerse, esto les transmite una idea de control sobre la situación y qué pueden hacer para ayudar: lavarse las manos con frecuencia, toser en un pañuelo o en el codo y dormir lo suficiente.
Mantenga su rutina: “A nadie le gusta la incertidumbre. Por eso, continuar con la rutina y la previsibilidad será de mucha ayuda en este momento”. Programar los días con horarios regulares para comer y dormir y algunas actividades escolares, es esencial para que sus hijos estén contentos y saludables. Pero con los niños de estas edades, las actividades escolares deben realizarse en periodos cortos de no mas de 40 minutos seguidos de un descanso de 10 minutos. Y luego que puede continuar con otro periodo, de acuerdo a sus tiempos como padres que seguramente también están tele trabajando y atendiendo labores domésticas. No se deje estresar por estas actividades, vívanlas como algo agradable y parte importante para este momento.
Esté atento a los signos de ansiedad en los niños: Lo más seguro es que los niños no tengan las palabras para expresar su preocupación, pero ustedes pueden ver signos de ello. Pueden, por ejemplo, ponerse de mal humor, sensibles, más inquietos, tener problemas para dormir o parecer distraídos. Es muy importante que los adultos, traten en lo posible de mantener la tranquilidad y seguir sus rutinas en casa.
Estén pendientes de lo que los niños ven en los medios: que en lo posible no estén en contacto con demasiada información o imágenes terribles que puedan ver en la televisión, las redes sociales, las computadoras, etc. Para los niños mayores, hablen sobre lo que están escuchando en las noticias y corrijan cualquier información errónea o rumores que puedan escuchar.
Muy importante que los adultos seamos un buen modelo a seguir: El COVID-19 no discrimina y nosotros tampoco deberíamos. Si bien COVID-19 comenzó en Wuhan, China, no significa que todas las personas que tengan ascendencia asiática, italiana, o de cualquier otra parte, les vayan a contagiar el virus. El estigma y la discriminación lastiman a todos al crear miedo o enojo hacia los demás. Cuando tu como madre o padre, o adulto significativo, muestras empatía y apoyo a quienes están enfermos, los niños también lo harán.
Como adultos es necesario estar bien informados por fuentes realmente confiables, y si es del caso consulte con personas expertas, no prestemos atención a todo lo que nos llegue por el celular. Pues todas las dudas y la información errónea pueden crear más miedo y pánico de lo necesario. ¡Esta es una situación inédita! Nunca antes nosotros habíamos vivido algo así.
Por:
María Consuelo Montalvo
Psicóloga Sección Primary